La jornada de Liga Nacional tuvo un arranque más que emotivo en el duelo que llevaron adelante Independiente de Oliva y Zárate. El conjunto cordobés, que venía de ganarle a Platense, dio vuelta un partido increíble y superó a los de la provincia de Buenos Aires con un ajustado 72 a 71. El dominio del marcador le perteneció casi totalmente a los dueños de casa, pero tras una diferencia de 14 puntos; los de Martín González reaccionaron a tiempo y festejaron en el último segundo.
Zárate supo aprovechar los errores de Independiente en el primer tiempo. Las pérdidas de la visita se acumulaban y cada una de ellas significaba un contragolpe para los de Manu Anglese. Con velocidad y buena efectividad se escaparon en el marcador. Pero los de la Docta no iban a vender barata su derrota. Ajustaron significativamente la defensa y empezaron a apostar por su juego colectivo. Ahí, encontraron respuestas en la conducción de Cabrera y la eficiencia de Enzo Filippetti. A ellos se le sumó el goleo de Vallejos.
En el cierre, presionaron en los momentos más calientes del partido, provocando una serie de pérdidas consecutivas, que castigaron con alta efectividad. En el cierre, la distancia era de dos, y podían optar por buscar el empate; pero Rolo encontró al capitán solo en la esquina, y ninguno de los dos dudó. A pesar de que la marca intentó puntear el tiro, ya era tarde. La naranja abandonó los dedos de Pautasso y se dirigía hacia el aro. La euforia se desató en el banco visitante cuando abrazó las redes, provocando el tercer festejo en cuatro presentaciones para Independiente de Oliva.
Foto: Prensa Zárate
Nota: Ison Patoco