La mañana del martes se vio sacudida por las declaraciones de Rubén Magnano al colega Emiliano Nunia en Súper Deportivo Radio. El campeón olímpico en Atenas 2004 anunció que su retiro de manera oficial. «No dirijo mas. Estoy en un momento donde no pretendo tener distracciones que me saquen el valioso tiempo que hoy tengo para mí familia. Por eso cuelgo los botines». Con ese gesto tranquilo, en la comodidad de un sillón, explicó los motivos que lo llevaron a tomar la decisión de no continuar con su labor en el deporte a sus 69 años. «No me he tomado el tiempo de pensar qué cosa es seductora hoy para mí. Ese tiempo hoy no es negociable y sé que si dirijo voy a tener que invertirlo. Me retroalimento con cosas del básquet«.
Magnano estuvo a cargo de la Selección Argentina tras la salida de Julio Lamas. En su extensa trayectoria quedaron algunas de los mayores logros del equipo albiceleste. Desde el FIBA Américas en Neuquén, el subcampeonato en el mundial de Indianápolis 2002, la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. En el medio, victorias contra los Estados Unidos, la eliminación a Grecia en condición de local y el desarrollo de un equipo que quedó en la historia del deporte internacional.
En el ámbito nacional también se destacó como entrenador de Atenas de Córdoba, equipo que dirigió en múltiples temporadas y logrando cuatro títulos. El más recordado, el equipo plagado de estrellas en 1998, en la final disputada en el Luna Park, barriendo a Boca 4 a 0. Se consagró en torneos continentales y alcanzó el tercer puesto en el Open McDonalds de Paris, quedando a un paso de disputar la final contra los Chicago Bulls de Michael Jordan.
Una vez pasada su etepa en la Selección Argentina, tomó las riendas de la Selección de Brasil y, posteriormente, en Uruguay. Saliendo unos minutos del rol periodístico; y volviendo a ese lugar de fanático que alguna vez supimos ser, no hay más que palabras de agradecimiento para Rubén. Los logros deportivos quedarán en la historia grande; no solo de nuestro país, sino en todo el mundo. El autor intelectual de los momentos más grandes del básquet argentino, el motivador, el que jamás dudó a la hora de enfrentarse a los grandes, a los poderosos.
La reacción de un par
Julio Lamas fue el primero en reaccionar a la noticia del retiro de Rubén. Lo hizo en sus redes sociales, con palabras de afecto con el cordobés. «Todos de pie, se retira Ruben Magnano. Nos llevó a la gloria en Atenas 2004 y a ganarle al Dream Team, siempre creía que se podía ganar el próximo partido y los preparaba al detalle como nadie. Una persona fundamental en la historia de nuestro básquet. Gracias Ruben!»
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