Victor Wembanyama es la gran atracción del draft de la NBA que se llevará a cabo esta semana, y es tanto el hype por su llegada a la liga que se da por hecho que será parte de los San Antonio Spurs a partir del próximo curso, si es que no ocurre algo extraño en el medio (aunque la liga está acostumbrada a esas narrativas).
Sin embargo, no será sencilla su llegada a la franquicia texana al menos desde la previa, ya que los de Pop eligieron solamente en dos oportunidades con el primer pick desde su llegada a la NBA. Y vaya si hicieron historia quienes tuvieron ese privilegio, ya que fueron dos referentes en la historia de SAS desde el primer momento y dejaron su huella, algo con lo que deberá lidiar ‘Wemby’ a partir de hoy.
El primero fue David Robinson, ‘El almirante’. Drafteado en 1987, se hizo de gran cantidad de récords de la franquicia para empezar a hacerla grande con su presencia y fue uno de los internos dominantes en la época en la que el juego gravitaba a esa zona de la cancha.
Es dueño de dos títulos, los dos primeros de la franquicia en 1999 y 2003, además de haber sido elegido una decena de veces para el All-Star Game y otras diez integró quintetos All-NBA más ocho All-Defense. Entre sus lauros individuales, el más importante fue el MVP alcanzado en 1995.
Dos años más tarde de ese MVP Award llegaría otro pick 1 para los Spurs, con el que seleccionarían a Tim Duncan para completar esa dupla totalmente dominante en la pintura. La carrera de ‘Timi’ es más que conocida y no es necesario aclarar que es el jugador más importante en la historia de la franquicia.
De todas maneras bien vale repasar algunos de sus máximos reconocimientos: cinco títulos (todos los del equipo desde 1999 a 2014), cuatro MVP Finals (los cuatro primeros, el quinto fue de Kawhi), dos MVP en back-to-back 2002 y 2003, y una quincena de All-Star Games, All-NBA y All-Defense. Un poco de lo muchísimo que hizo el de Islas Vírgenes por el equipo blanco y negro.
Sin dudas la vara está altísima si se trata de ser el pick número 1 de los Spurs, ya sea por logros individuales o colectivos. No se pretende tampoco que el francés Wembanyama logre lo mismo que sus dos antecesores y no sería justo con él, a fin de cuentas es un chico y tiene que hacer su camino en la liga, pero a priori el espejo va a mostrar demasiados premios y reconocimientos, y estará en él imitarlos o sucumbir ante tanta grandeza.
