Tortu se sumó al equipo en Las Vegas tras el Covid-19. La bienvenida de sus compañeros y sus sensaciones durante la espera y en este arribo. «Voy a ir de a poco», admitió.
Con Gabriel Deck la procesión va por dentro. Siempre. Por eso, cuando entra el Cox Covilion, no se abalanza sobre los compañeros para mostrarles lo contento que está con verlos nuevamente, con estar junto a ellos en esta nueva misión de El Alma Argentina. Claro, hay un tema de protocolo, es preferible sólo saludarlos con la mano, pero más allá de eso, Tortu es así. Todo lo que siente y piensa corre por su interior. No muestra la emoción que tal vez alguien podría pensar en un reencuentro así, pero eso no quiere decir que no la sienta. De hecho, detrás del barbijo, en su sonrisa o en el brillo de sus ojos se nota la felicidad. Y la exteriorización viene de parte del resto. Aplausos cuando pisó el parquet, palmadas, choques de mano, algún grito y la ocurrencia, siempre a tiempo de Facu Campazzo, uno de sus mejores amigos del plantel, en este caso a modo de canción. “A poco que debutó, Tortu Deck, Tortu Deck”, le canta, usando la melodía del tema de Maradona, mientras va a su encuentro y no puede evitar el abrazo a la altura del pecho.
Así, como pueden ver en el video, recibió la Selección a una de sus figuras, a quien todos extrañaron en estos ocho días de ausencia del santiagueño en esta previa olímpica en Las Vegas. “Me preocupa que no está todavía con nosotros”, aceptó Nico Laprovittola hace tres días. El alero era el primero que tenía que viajar, el viernes 25, pero 36 horas antes supo que su testeo de Covid-19 había dado positivo. Ahí se complicó todo. “Estuve más de 10 días aislado en Colonia Dora, mi pueblo, sin poder hacer, ni un entrenamiento. Luego, cuando el nuevo testeo me dio negativo, me fui a Buenos Aires a hacerme los estudios (NdeR: cardiológicos y respiratorios) y recién cuando estuvieron los resultados, pude embarcar para acá. Estoy muy contento. Y ya más tranquilo. En realidad, siempre tuve paciencia, no me desesperé, pero tenía muchas ganas de sumarme”, resaltó en charla con Prensa CAB.
“Claro que cuando me enteré del positivo se me derrumbó todo un poco. Fue algo frustrante, es verdad, porque veía las publicaciones en las redes de CAB y me daba ganas de estar acá, con todos. Pero sabía que era imposible, que debía esperar un poco más y ya llegaría el momento. Por suerte ya estoy acá y miro para adelante. A ponerme bien ahora…”, relató el jugador que viene de destacarse en los 10 partidos que disputó en la NBA con la camiseta del Thunder (promedió 8.4 puntos, 48% de campo, 4 rebotes y 2.4 pases gol en 21 minutos).
Deck contó que en estos poco más de 10 días no hizo “nada, cero”, porque estaba en su casa sin las condiciones para entrenarse. Admite que “en los primeros días me va a costar bastante”, pero asegura “que en 10 días voy a estar bien”. La idea del cuerpo técnico es llevarlo de a poco, de menos a más, como se está haciendo con Garino, por caso, incluso es muy posible que Gaby no juegue el amistoso del jueves contra Nigeria, a puertas cerradas, en el Cox Pavilion. “Vamos a ir de a poco aunque sabiendo que Tortu es un jugador que rápidamente se pone bien”, opinó Hernández. Justamente eso, el conocimiento que este cuerpo técnico tiene de él, lo deja tranquilo. “Sé cómo piensa y trabaja Sergio. Vamos a ir de a poco, pero con confianza que voy a llegar muy bien al debut en los Juegos”, cerró nuestro querido Tortu.
Nota y foto: prensa CAB