Luca Vildoza, el campeón y MVP de la Fase Excepcional de la Liga Endesa que obtuvo el pasado martes el Baskonia, pasó por 3X3 Radio en el aire de UCU WEB RADIO. En la charla dejó todas sus sensaciones tras el gran logro en España. Además, habló sobre el proceso de preparación que vivió durante cuarentena obligatoria tras la lesión que padeció a comienzo de año en uno de sus hombros, la alegría del logro obtenido y explicó la jugada final donde el argentino convirtió el doble que definió el partido ante Barcelona.
Mirá el video completo de la nota y lee sus declaraciones más destacadas:
«Increíble. Pero si pienso en eso la verdad que la cabeza se me hace un lío y empezaría a pensar que porqué no me opere antes en el momento que me lesiono y no intento infiltrarme para jugar y todas esas cosas pero bueno, lo que hace uno como jugador para poder estar a disposición del equipo y todo eso. Pero como te digo, la decisión al final fue la mejor y ahora disfruto. Disfruto más que nada de estar bien físicamente y de volver a ser jugador«
«Yo estaba en el banco, yo ni siquiera estaba en la cancha. Y en realidad la jugada no era para mi y yo ni siquiera había escuchado la jugada. Entonces yo sabía que había un mano en mano con alguien, pero no sabia con quien ni donde.» Cuando me acomodé en la cancha dije «yo acá en la esquina no voy a molestar y se aparece un corte, aparece«. Y apareció justo, pero si ves el vídeo el italiano ya estaba cargando la pelota para tirar un triple y en el momento que la carga hace el pase. Y yo no podía parar de gritar porque había cortado solo y ya llevaba un segundo, segundo y algo que en el básquet es mucho y estaba solo.
«En mi vida había hecho una puerta de atrás como la que hice, la verdad que se me prendió la lamparita y por suerte el defensor no se donde estaba la verdad. Surgió, situaciones de juego. Lo leyó bien el pase también y quedó solo así que nada, la verdad que la felicidad hace dos-tres días que terminó el partido es increíble. Llevo dormido 4 o 5 horas. Y no que haya salido de fiesta 20 horas, sino que no puedo, me acuesto y el corazón me empieza a latir.»
«No éramos los favoritos, no éramos ni por poco los favoritos. La verdad que estaba muy nervioso, hable con varios amigos y les decía, no puede ser que tenga el miedo que tengo, no puede ser que tenga los nervios que tengo porque, a ver no es que sea un experimentado, pero ya había jugado una final y ya sabía lo que se sentía, pero no sé, sentí que esta final era…
«Aparecí yo que nadie esperaba que después de seis meses hubiese estado al nivel que estaba, apareció Jason Granger, apareció Achille Polonara, «Toko» sabemos lo que da siempre, Henry; aparecieron muchos jugadores que quizás en el plan del otro equipo no estaban. Y cada partido había un jugador, un jugador diferente que destacaba. Así que creo que eso nos hizo más peligrosos a la hora de atacar y obviamente de defender»
«Sin duda la defensa fue clave, porque los últimos tres partidos yo creo que no estuvimos tan efectivos con el aro, es más terminamos con 69 puntos, 67 y jugarle al Barcelona con un score tan bajo, jugarle al Valencia con un score bajo porque con el Valencia metimos 75 también, para ganar un partido de semifinales, la verdad que destaca la defensa. Pero también hay que destacar la mini pretemporada esta que tuvimos que si alguno hubiese visto todo lo que corrimos se hubiese dado cuenta de porque defendíamos de esa manera.»
«Estaba muy feliz, la verdad que trabajé bastante durante la cuarentena, yo tengo un garaje a donde lo explote no había más material para usar. En eso agradecer al preparador físico que estuvo conmigo, llamándome todos los días por la mañana, haciendo doble turno. La verdad que ahí también me cambió la mentalidad, me hizo trabajar mucho y mejorar el hombro. Porque había días en los que me dolía y yo sentía que quizás no estaba para volver y los primeros días sentía dolor cuando volví a tocar la pelota y la verdad que no me sentía tan bien y cuando empezamos a jugar la verdad que.. fue increíble, porque de un momento para el otro el hombro chau, no sentía más nada, quizá eran los nervios de volver a jugar al básquet que me hizo olvidar todo tipo de dolores. Y la verdad que disfrute mucho porque fueron seis meses sin tocar una pelota, sin poder competir y la verdad que lo extrañaba.»
«Creo que basquetbolísticamente no había mucho que mejorar, si bien nos cambió ciertos conceptos de la manera de defender, quizás hacer otro tipo de defensa, la manera de atacar que era un poco más ordenada a la que veníamos jugando. Creo que la mentalidad que él nos impuso, todos los días, el ir a entrenar todos los días con vendaje, el todos los días recibir una charla diciendo que él quería ganar porque desde el minuto uno desde que llegó al Baskonia mencionaba la palabra ganar y ganar, y trabajar, y la mentalidad ganadora y así fue, eso nos entró en la cabeza en la mini pretemporada esa que tuvimos, trabajando mucho. Y yo creo que en el momento en el que le ganamos, en el primer partido a Bilbao nos cambia la mentalidad. Porque no íbamos con la mentalidad de estar tranquilos, de bueno de hacer un torneo, íbamos ya con la mentalidad de ganarlo. Y creo que eso también nos hizo cambiar, la mentalidad con la que él mira el básquet, la mentalidad que nos compartió a nosotros.»
«Me pregunto obviamente cómo estaba, cómo me sentía. Él todavía no me había tenido y no sabía la manera de jugar yo en el campo. Si bien hubo partidos que jugué mucho de escolta en este torneo, la verdad que sentí siempre un apoyo en él que nunca me lo hubiese imaginado, nunca pensé que después de tirar 1/10 en tiros de campo iba a salir de un partido y me iba a alentar, a motivar que siga tirando, sabiendo que yo si él me seguía apoyando de esa manera yo atrás hacia lo que estaba haciendo en los últimos partidos; que era defender bastante y correr, marcar el ritmo y motivar a mis compañeros. La verdad que en eso le tengo que agradecer mucho a él y obviamente a todos los compañeros que confiaron bastante de que yo luego de seis meses pueda volver como uno de los protagonistas.»
«Disfruto siempre de jugar, disfruto de que confíen en mí también para cuando me necesitan en otra posición porque en ningún momento voy a decir que no más que nada cuando hay que tirar al aro.»
«Salí del partido, salí de recibir el premio, eso de festejar y fui al vestuario y la única persona que quería llamar era a mis viejos. Sabía, intuía, lo que mis viejos podían estar pasando después de que me hayan dado el premio y después de haber sido campeones, intuía que mi mamá estaba llorando, que mi papá estaba saltando de alegría por todo el edificio así que dije bueno los voy a llamar yo. Para que sepan yo muy pocas veces hago una videollamada y yo suelo llamarlos, pero videollamada jamás. Y en ese momento creo que se merecían y yo también quería sentirlos un poquito más cerca mío y nada los llamé con el trofeo de MVP al lado y se les notaba, yo sabía. Mi mamá estaba toda colorada de llamar seguramente de saltar gritar y nada, la verdad que la alegría que sentimos los tres después de todas las lesiones y todas las cosas que pasamos, más que nada la distancia que hay entre nosotros.»
«Rescato más que nada las cosas que logramos, la verdad que la química que se mostró al final era algo con lo que yo convivo desde que llegué. Desde que llegué me hicieron sentir como si fuera uno más, más allá de que no era absolutamente nadie acá en Europa.»
«Al que más rescato y al que más admiro, por lo que es y por lo que transmite, es al capitán, a «Toko», creo que llevo tres años con él y el primer día que yo llegué fue el único que me saludo y me pregunto y como estaba y que tal. Es la estrella del equipo, lleva siendo la estrella hace cuatro, cinco, años y la verdad que hasta el día de hoy que se formó una cierta amistad y es de las personas que más quiero en el equipo.»
«Creo que el chico de Quilmes siempre va estar adentro mio y creo que le debo muchísimo al club. Pero creo que ya deje de ser ese chico, me siento, cada año que pasa que voy dando un pasito adelante. Y más allá del premio que recibí y más allá de haber sido campeones, creo que en la cancha me sentía más un líder, creo que era de los pocos que hablaba mucho y motivaba y me sentía líder. Veía cosas quizás otros no veían y me sentía con más comunicación entre nosotros y yo era de los que más hablaba, que eso en mi vida hubiese pasado, porque yo no suelo hablar ni dentro ni fuera de la cancha y la verdad que el hacerlo en este último torneo me dio otra visión y me hizo darme cuenta de lo que en realidad valía.»
«¡Qué no lloré cuando se vaya de Argentina! Hay millones de cosas que le diría pero la verdad que el camino que transité no lo cambiaría por nada. Las veces que sufrí por el saber que ya me venía y que si perdía y era el último partido mio. Por todo lo que sufrí, por todo lo que lloré, la verdad que la vida te devuelve todas las cosas malas, quizá por las que sufrís al pedo. Ahí que nada estoy contento de estar donde estoy y nada, disfruto.»