El cierre de la jornada de Liga Nacional fue en Santiago del Estero, en donde Quimsa terminó festejando con un gran segundo tiempo. Los dirigidos por Leandro Ramella, reaccionaron bajo la conducción de la dupla conformada por Brussino y Robinson. La intensidad ofensiva y la extensión del plantel fueron algunas de las claves en este — a –.

Con el resultado de esta noche, Quimsa alcanzó un récord de 20 victorias y 11 derrotas, para mantenerse en el cuarto lugar de la tabla de posiciones, por debajo de Boca (21-7), Riachuelo (19-8) e Instituto (19-8). Los cordobeses, por el otro lado, siguen la decimosexta colocación, con un registro de 11-19.

Con un claro dominio del juego interior, más algunas apariciones desde el perímetro, Independiente sorprendió en el arranque del juego, tomando una buena distancia en el marcador. Pero era solo cuestión de tiempo para que los fusionados se pongan nuevamente en juego. Con paciencia y la claridad ofensiva de Perez Tapia y Sansimoni, aprovecharon los caminos abiertos hacia el aro para empezar a descontar. Lo mejor de Quimsa apareció en el tercer cuarto, con 35 puntos en 10 minutos, encabezados por Brussino y Robinson, que se combinaron para dar vuelta la historia y pasar a dominar el marcador. Los últimos diez minutos fueron una prueba física. Independiente empezó a perder soldados con sobrecarga de faltas (Nally y Tabarez), y los locales aprovecharon para sumar desde la velocidad y las salidas rápidas. Finalmente, manejaron el resultado a su favor y festejaron un nuevo triunfo en casa.

Las figuras:

Brandon Robinson fue el máximo anotador de Quimsa con 25 puntos, además de 3 rebotes. Con 21 lo escoltó Juan Brussino. Agustín Pérez Tapia, que no había estado en el clásico ante Olímpico, completó el tridente ofensivo más importante con 15 unidades. En la visita, lo mejor vino de la mano de Enzo Filippetti, autor de 22 puntos y 3 rebotes.

 

Foto: prensa Quimsa
Nota: Ison Patoco