El Oklahoma City Thunder venció a los Boston Celtics 118-112 en un TD Garden encendido. Reafirmó su dominio en la temporada sobre los de Massachusetts tras haber ganado también el primer cruce. El partido fue un espectáculo de intensidad, con cambios de liderazgo constantes y un cierre electrizante que dejó una sensación de serie de playoffs.
El encuentro arrancó con un ritmo frenético. Boston salió decidido a imponer condiciones desde el perímetro. Lo hizo a partir de Al Horford (18 puntos, 10 rebotes -tres ofensivos-, seis asistencias y seis triples) y Derrick White (22 unidades, ocho tableros, cinco pases-gol y dos robos), dupla que combinó seis de los nueve triples de los locales en la primera docena de minutos.
Sin embargo, Oklahoma City no tardó en responder. Shai Gilgeous-Alexander (34 puntos, cinco rebotes y siete asistencias) mostró su habitual calma bajo presión. Comenzó a castigar con penetraciones y tiros de media distancia, mientras que Chet Holmgren (23 tantos y 15 tableros) se hizo notar en la pintura tanto en defensa como en ataque. El primer cuarto fue un ida y vuelta constante, con los locales cerrando el parcial 30-28 a su favor.
En el segundo período, el equipo de Mark Daigneault ajustó su defensa y comenzó a inclinar la balanza. Luguentz Dort (13) se encargó de dificultar cada intento de Jaylen Brown (10), quien no encontró su ritmo en toda la noche. La visita también supo aprovechar cada desajuste defensivo de Boston para atacar la pintura y sumar cerca del aro.
A contrapunto, el combinado de Joe Mazzulla careció de fluidez en su ataque. Dependió demasiado de Tatum (33 tantos, ocho rebotes y ocho asistencias) y White. Oklahoma City capitalizó esos momentos de inconstancia del rival y logró cerrar la primera mitad con una ventaja de tres puntos (63-60).
La tónica no cambió en la segunda parte. Boston no pudo aprovechar los triples abieros que tuvo y sólo contó con constancia ofensiva por parte de Tatum. El ala-pivote sumó 11 de sus 33 puntos en el pasaje, como también buena parte de los 28 tantos en el período. La diferencia llegó a ser de 12 para un equipo de Daigneault que castigó con el triple, pero que mermó su rendimiento sobre el final. Incluso dejó la puerta abierta a la igualdad (88-88).
Oklahoma City volvió a tomar las riendas del juego en la última docena de minutos. Controló tanto a Brown como Tatum, dupla que combinó un 1/13 en tiros de campo. Si bien el equipo de Mazzulla volvió a tener triples con chances claras de conversión, no pudo castigar. Del otro lado, la dupla de Gilgeous-Alexander y Cason Wallace (14) combinó 16 de los 30 tantos para finiquitar la historia con un 118-112.
Con este resultado, el Thunder se llevó la serie de temporada ante los Celtics y reforzó su candidatura al título. Demostró que puede competir al más alto nivel en cualquier escenario. Para Boston, la derrota le cortó una racha de cinco victorias consecutivas. No obstante, dejó en claro que el equipo tiene el talento y la intensidad para pelear por todo.
Si este partido fue un adelanto de lo que podrían ser las finales, los fanáticos de la NBA pueden esperar una serie épica en junio.
Artículo: Matías Naidich | Redactor de UCU y productor de Camino al Garden
Foto: Getty Images.
Video: NBA.
