Madrugada profunda, lluviosa y fría de un jueves en España. El reloj espera que pasen las horas para hacer sonar su alarma inevitable del inicio de la rutina. Mientras la mayoría duerme, un grito estridente acaba con la monotonía. Gonzalo Vázquez festeja un tiro ganador de Jalen Brunson para que los Knicks le ganen a los Hawks en el Madison Square Garden. Una escena que se combina con la seriedad de su cobertura, plasmada en «El reverso» y «El confidencial». Acto repetido que deja entrever su fanatismo por un equipo a casi 6000 kilómetros de su casa.
Va a contramano de todo el país. Se notará luego en las ojeras de una mañana para encarar los quehaceres del día a día. El cuerpo podrá pesar, pero se apoya en el motor del movimiento: el amor. «La única manera de justificarlo es con amor. Los horarios son difíciles. Son realmente muy complicados, pero sigues por amor», le confiesa casi un mes después a Crossover en Uno Contra Uno.
La charla se extiende a casi una hora, manteniendo la frialdad de quien analiza para luego escribir. Una trayectoria extensa que se deja descubrir con cada palabra y postura. Expresiones que complementan a lo que plasmó en libros como «101 historias NBA», «Viaje al centro de la NBA» e «Invación o victoria: extranjeros en la NBA». Porque a ese amor lo acompaña con muchísimo trabajo: «Cuando cubres la NBA desde España tienes partidos de la costa oeste que inician a las 4:11 de la madrugada. A veces, no han acabado y sientes que los niños ya se han despertado. Te sientes un bicho raro porque vais a contramano del mundo. Porque sabes que esto no es sólo ver los partidos. Es analizarlos y machacarlos».
La impredicibilidad de la NBA
La NBA cambió mucho desde que Gonzalo Vázquez empezó a trabajar en torno a la liga. Incluso, está muy separada de uno de sus viajes a Nueva York donde sintió la rareza de mirar baloncesto NBA a las dos de la tarde.
Lejos de los espacios comunes y de los comentarios click-bait, reconoce lo positivo sobre la competencia actual. «Lo que más me gusta del momento actual es que se ha vuelto impredecible. Formo parte del grupo que más allá del paso del tiempo voy a seguir viendo la NBA. Esta tiene el detalle de la impredecibilidad», comenta durante la entrevista.
Algo que marca a la NBA es que no repite campeón desde 2019. Raptors, Lakers, Bucks, Warriors, Nuggets y Celtics, en ese orden. Ya está un poco alejada de los Warriors dominantes del 2015 al 2018. Por eso menciona: «Este año obviamente los Celtics son los grandes candidatos al título y probablemente los más cercanos a la realidad de aquellos Warriors. Pero varios equipos crecieron como los Cavaliers y el Thunder. Entonces hay varias señales de un escenario de otro campeón diferente. Me gusta mucho que hoy es una liga abierta».
La mirada de Gonzalo Vázquez sobre el Periodismo XXI
El cambio de época es claro. Cada quien puede tomar un celular e intentar jugar a hacer periodismo. Un par de movimientos comunes en redes sociales para buscar reacciones dará seguidores y visibilidad. Lejos del recorrer las calles de Nueva York buscando las historias que no se quieren dejar ver. Distanciado de ir a sacar fotos del Empire State para ver lo qué pasa en las madrugadas del playground en Rucker Park o esperar minutos interminables para ver qué dice Hart sobre el trabajo defensivo del elenco de sus amores.
El desafío, entonces, pasa por revalorizar la presencialidad: «El problema es que hoy en día es que con cuatro highlights, un tema polémico y poco más, cualquier persona se considera que cubre la NBA. La presencialidad perdió valor, la persona en teoría lo puede hacer desde su casa. Entonces, los grandes medios no apuestan a la cobertura presencial. Y esa es una batalla muy jodida».
La clave entonces pasa por hacer un diferencial: «Tuvimos una época de oro en la que podía hablar con españoles, argentinos y latinoamericanos, entonces todos los días podía vender algo a mi país». Pero encontró en su pasatiempos, la clave para poder marcar esa distancia: «A la par de esas coberturas, tenía un blog, una bitácora, en la que contaba todo lo que pasa por fuera. Desde ahí la idea de tener un libro. Ahí es cuando te das el lujo de compartir lo que pasa dentro y fuera de la cancha. La vida de la NBA».
A la par, marca que existe un ‘clasismo de medios’ en la NBA. No pasa sólo con los influencers, sino también con los periodistas ‘estrellas’. Por eso expresa: «Me acerqué a hablar con Ray Allen y me respondió con suma amabilidad. Después intenté trabajar a la par con de de una cadena grande. Casi que me hacía una pantalla, un bloqueo para que no pueda meter el micrófono».
Por eso, Gonzalo Vázquez concluye que es muy importante saber gestionar lo que se consume. La clave pasa darle visibilidad a lo que realmente tiene valor: «Soy de perfil bajo. A veces me indigno con cosas, pero prefiero no publicar nada. No caigo en las barbaridades que pasan en redes sociales».
La entrevista completa a Gonzalo Vázquez