Boston Celtics dominó en el Spectrum Center y logró una victoria contundente por 124-109, mostrando una ofensiva poderosa y, en grandes pasajes, una defensa sólida que anuló los intentos de los Hornets de competir en casa.
En un partido donde los Boston Celtics impusieron su ritmo desde el inicio, Jayson Tatum se destacó como líder en la ofensiva, realizando múltiples jugadas claves y demostrando su habilidad atlética. Su energía en la cancha inspiró al equipo y le permitió a Boston mantener una ventaja considerable a lo largo del encuentro.
La defensa de los Celtics fue un factor determinante, ya que limitaron las opciones de los Hornets en momentos cruciales. La agresividad en las transiciones defensivas y la capacidad de cerrar espacios complicaron los intentos de los jugadores de Charlotte para generar juego fluido, obligándolos a realizar tiros forzados.
Por su parte, los Hornets intentaron mantenerse en el marcador a través de LaMelo Ball y Tre Mann, pero se vieron superados por la intensidad y el orden de los Celtics. Aunque Charlotte mostró destellos de buen juego, no logró aprovecharlos para reducir la diferencia de puntos.
Esta victoria representa un impulso importante para los Celtics en este comienzo de temporada, reafirmando su posición como contendientes en la Conferencia Este. Con un juego efectivo en ambos lados de la cancha, Boston demuestra que tiene el talento y la
cohesión necesarios para repetir este año.
Artículo: Matías Naidich | Redactor de UCU y productor de Camino al Garden
Foto: Getty
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