A segundos del final del partido en el Juego de las Estrellas, Rubén Magnano fue homenajeado como un campeón como él lo merece, con una ovación de pie y el reconocimiento de todos los presentes ante semejante carrera como entrenador que poco tiempo atrás llegó a su final.
Magnano, entrenador del equipo Azul en el Espacio DAM de Zárate, se mostró emocionado al recibir de parte del «Pichi» Campana y Andrés Nocioni, con quien tocó el cielo con las manos en Atenas 2004, una camiseta con su nombre, el 10 en la espalda y el aro que se le entrega a los MVPs del Juego. La gente se prendió con el homenaje al grito de «Dale campeón, dale campeón».
Magnano anunció su retiro hace unos meses, en una de las noticias que movió a los fanáticos del baloncesto. Las redes sociales y los ex jugadores le brindaron palabras de agradecimiento. A lo largo de su extensa carrera; estuvo a cargo de la Selección Argentina, Uruguay y Brasil.
Las palabras de Rubén:
Instantes más adelanta, con el micrófono del «Gallego» Pérez, agradeció a los jugadores. «Estoy viviendo un momento de plenitud, donde la gratitud me golpea las puertas y me acaricia el alma, son momentos únicos«, reconoció Rubén. Y valoró el trabajo de sus dirigidos: «Son la materia prima, sin la aceptación de ellos ningún entrenador llega a ningún lado«.
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