En el Gigante de la Ruta Nueve, Independiente de Oliva volvió a demostrar que en casa va a ser complicado ganarle. Los cordobeses pisaron el acelerador en la segunda mitad para bajar a San Lorenzo, que venía de superar a Quimsa en su última presentación. Con el 86 a 63 final, los de La Docta suben hasta el puesto 13, con un récord de 10-13. El ciclón, por su parte, cae hasta la novena colocación, con un registro de 12-10.
En los minutos iniciales del juego, fue el local quien dio el primer paso siendo muy efectivo en sus ataques de la mano de Noblega y con el aporte de su capitán Giletto. En tanto, los de Boedo se pusieron a tiro con la conducción de Pérez y Basualdo en la pintura. Por todo esto, el primer cuarto termino igualado en 17. San Lorenzo continuó desnivelando con los lanzamientos de tres puntos siendo efectivo y teniendo el control de las acciones y se fue al descanso largo arriba por 36-33.
Independiente reaccionó en el tercer parcial. Giletto fue la carta de gol del local, pero el cierre tuvo preparado un capítulo para Pablo Alderete que, con certeras defensas y un efectivo ataque, le dio al local una tranquilidad en el marcador. Con un parcial de 27-13 se llevó el tercer período por 69-60. Con mucho corazón y buen juego, los de Oliva dominaron ampliamente la segunda parte del juego llegando a mitad del último cuarto estableciendo la máxima distancia 70-54 a su favor. Todo se mantuvo así hasta el final. Con un nivel superlativo de Paz, Giletto, Alonso, Noblega y Alderete, Independiente se quedó con el juego por 86 a 63.
Nota y foto: Prensa Independiente