Terminó la travesía de Campazzo en Dallas y su promedio final fue de 1.3 puntos, 1.1 asistencias y 0.8 robos en 6.5 minutos de 8 encuentros. Aunque parezcan malos números, algo esconde por detrás.
Si bien disputó muy pocos encuentros como para hacer un análisis profundo de sus números, los principales detractores del argentino le achacan una mala producción. Lo que no toman en cuenta en su análisis el la cantidad de minutos en relación a su aporte.
Mientras que quien encabeza la lista en robos -O.G. Anunoby- sumó 2.4 recuperos en 36.6 minutos, Facu consiguió 0.8 en 6.5 minutos. Esto nos daría un total de 1 robo cada 15.25 minutos por parte del jugador de Toronto y un robo cada 8.1 minutos para el argentino.
Nadie que haya jugado al menos 15 partidos -no es el caso de Facu- ha logrado la velocidad recuperadora de Campazzo. Los que están cerca son Paul Reed de Philadelphia -un robo cada 11 minutos- y Matisse Thybulle del mismo equipo con 1 cada 14.25.
El error está en tomar la estadística sin contexto. Ni Campazzo es malo por sumar 1.3 puntos por partido, ni es un fenómeno por ser el mejor promedio en robos por minuto en toda la NBA.
Otro ítem en el que destacaría -si se midiera por minuto y no por partido-, es el de la cantidad de asistencias. Facu necesita menos de 6 minutos para repartir una cosa que lo dejaría en la mitad de la producción del máximo asistidor de la liga, Tyrese Haliburton.
Sería inocente tomar este dato linealmente y decir que literalmente Campazzo está cerca de repartir las mismas asistencias que el base de Indiana, pero quizás sirva para concientizar lo fácilmente manipulables que son estos números sin contexto.
Nota: Manu Pérez
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