A principios de la semana pasada parecía haber luz al final del túnel para Estudiantes de Olavarría. Es que en la reunión llevada a cabo el martes en comisión directiva, la decisión fue no poner en venta la plaza de Liga Argentina, considerando que el plazo límite era precisamente ese viernes venidero, el 15 de julio, y las esperanzas de los hinchas se renovaban por volver a ver a su club una temporada más en el segundo escalón del básquetbol nacional.
Sin embargo, los días fueron pasando y el silencio respecto a tan delicado tema volvió a ser parte del día a día en la localidad cementera del centro de la provincia de Buenos Aires. Falta de información, ninguna respuesta a las consultas acerca de lo que pasaría con el equipo y una nueva fecha límite acechando como una fiera a su presa, generaron nuevamente el descontento y ansiedad de sus hinchas, que una vez más son los que intentan sacudir el tablero para ver algún movimiento por parte de quienes manejan las piezas mientras ven los fantasmas del 2006.
El hermetismo de la dirigencia hizo imposible el acercamiento de nuevos grupos de trabajo integrados por hinchas que intentan mantener a flote a una institución que sin el básquet sería una más del montón. Además, no hubo contacto con posibles sponsors, ni los que estuvieron junto al equipo en los últimos años ni nuevos que quieran renovar la cara del proyecto y repetir el gran trabajo realizado en la 21/22 con el cuarto puesto en la conferencia Sur.
Esta falta de compromiso con la historia de un equipo que supo ser campeón de Liga Nacional, Liga Sudamericana, Panamericano de Clubes, Copa de Campeones y Top 4, todo eso más algunos subcampeonatos y terceros puestos nacionales e internacionales en un corto lapso de cuatro años, hace que una de las vitrinas más laureadas del país pueda volver a la sombra y el olvido si no cambia nada hasta el viernes 12 de agosto.
Es por esto que socios e hinchas del club albinegro no se quedaron de brazos cruzados y redactaron una carta pública dirigida a la comisión directiva, encabezada por Juan Emilio Incaurgarat como presidente de la institución y Carlos Emiliozzi en su función de vicepresidente:
Carta pública de hinchas a la Comisión Directiva del Club Atlético Estudiantes de Olavarría:
Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. En estos días agitados, cuando distintos rumores y ciertos indicios hacen suponer que una vez más será así, un grupo de socios e hinchas del Club Atlético Estudiantes de Olavarría esperamos, nos ilusionamos y pedimos una decisión dirigencial que nos demuestre que no siempre esa sentencia popular se transforma en realidad.
Pese a la reciente decisión de no poner en venta la plaza y de supeditar la posible presencia de Estudiantes en la temporada 2022-2023 a la conformación de un equipo de trabajo, y a las gestiones para reunir el presupuesto que demandará la participación albinegra en la segunda categoría del básquet argentino, el correr de las horas y ciertos hechos han puesto seriamente en duda la continuidad de este proyecto que tantas alegrías nos ha regalado a nosotros, los aficionados del básquet, y a buena parte de la comunidad de Olavarría.
A través de su historia, Estudiantes ha llevado el nombre de Olavarría a los escalones más altos del país y de Sudamérica. Nadie ni nada podrá quitar el prestigio justamente ganado por los numerosos dirigentes y colaboradores que dedicaron tiempo, esfuerzo y en muchos casos dinero a la conquista de esos logros.
“Yo veo al futuro repetir el pasado / Veo un museo de grandes novedades”, dice la canción escrita por Cazuza que en la Argentina popularizó Bersuit Vergarabat. Bien podría servir para describir el triste sentimiento que en estas horas nos envuelve frente a la cada vez más cercana deserción de Estudiantes de los ámbitos que nunca debería abandonar.
No se trata de reclamos caprichosos, de opinar desde la comodidad del hincha sin responsabilidades, ni de pretender poner en riesgo el patrimonio del club, por citar algunas de las críticas que hemos recibido durante las últimas semanas a través de las redes sociales.
Se trata, simplemente, de solicitar a los actuales integrantes de la comisión directiva del Club Atlético Estudiantes que sus acciones sean consecuentes con sus dichos. Y que la convocatoria a la conformación de un grupo de trabajo que maneje los destinos del básquet no excluya a dirigentes que durante largas temporadas mostraron su capacidad de gestión, su responsabilidad en el manejo de las finanzas y su pasión por devolver al Bata a los lugares centrales que supo ocupar.
Que no se repita la historia. Todos conocimos el sacrificio, el tiempo y el esfuerzo económico que demandó volver a los primeros planos tras la venta de la plaza de Liga Nacional, sumados a las críticas, los reproches y el intento de desprestigio que debieron sufrir dirigentes de la talla del recordado Daniel Trapani y sus laderos, luego de aquella epopeya que todavía hoy recordamos con orgullo.
Que no se repitan los errores. Que no se tome la misma actitud con los dirigentes que condujeron con demostrada eficiencia numerosas temporadas del equipo en la Liga Argentina.
Que no haya listas negras, que no haya excluidos. Que haya un club donde el proyecto sea más importante que cualquier nombre propio, por más importante que éste sea.
Atentamente, los acá firmantes.
A esto se suma una petición en la plataforma Change.org en la cual cualquier interesado puede demostrar su apoyo a la continuidad en la Liga Argentina de uno de los históricos animadores de la competencia nacional. Simplemente con nombre y apellido, aunque da la opción de hacerlo anónimo en caso de querer preservar la identidad, se puede sumar cualquier persona que quiera volver a ver al ‘bataraz’ en la Liga Argentina.
El complejo panorama que presenta el elenco olavarriense no será sencillo de resolver y eso se suma a, por ejemplo, la extraña nula actividad en las cuentas de redes sociales de básquet. En Twitter, Instagram y Facebook se había acompañado la movilización de los hinchas para continuar con el equipo, pero de un día para el otro eso se detuvo. Y no solo eso, sino también la cobertura de los equipos de inferiores, provinciales formativos y liga local no continuaron, evidenciando una clara censura al trabajo del departamento de prensa de la disciplina y el club. Solo queda una cuenta institucional ‘oficial’ en la que solo hay escuetos comunicados con algunos resultados y nulo interés por el deporte de la naranja, gracias al cual estuvieron en los primeros planos nacionales e internacionales.
No serán días o semanas sencillas para los seguidores del equipo olavarriense que realmente quieren ver su básquet en su ciudad. El futuro está en juego y queda cada vez menos para una resolución, una que será blanca o negra como sus colores, pero que llegó a un punto de no retorno en el que ahora los hinchas también juegan un papel importante y están acompañados del lema de la institución: «Es tuyo, vos lo hacés grande«.