El anuncio del Barcelona de la contratación de Pau Gasol hasta final de temporada causó una profunda conmoción en la Ciudad Condalentre los aficionados azulgranas. El hijo pródigo vuelve a casa 20 años después de haberse marchado a la NBA y el impacto de su fichaje ha sido inmediato y brutal.
Los aficionados azulgranas, tras constatar de forma oficial su regreso primero se frotaron los ojos de incredulidad, y luego se lanzaron como posesos a intentar hacerse con la nueva camiseta que lucirá Pau Gasol en el Barcelona. El club trabajó a marchas forzadas para tener lista cuanto antes la nueva elástica del crack, que ya se puede adquirir en la tienda oficial del club.
La noticia corrió como la pólvora por la Ciudad Condal y de inmediato se desató la locura, con cientos de aficionados se apresuraron a dirigirse a la tienda oficial del club para intentar hacerse con la camiseta de su ídolo. Enseguida se formaron largas colas de gente que deseaban tener cuanto antes la preciada prenda de su ídolo, pese a que su precio, 110 euros, no está al alcance de todos en estos tiempos de pandemia y crisis económica.
El aficionado culé, que llevaban días apesadumbrados por la mala marcha del equipo de fútbol, han encontrado en la vuelta de Pau Gasol un motivo para sonreír. El Barcelona, si no lo era ya, se ha convertido tras fichar al exNBA en el principal candidato para ganar los títulos de Liga y Euroliga. Ya hay quien dice que este puede ser el mejor equipo de baloncesto de la historia del Barcelona, una plantilla de NBA.
Se verá estos meses la impronta de Pau Gasol en el equipo en lo deportivo, pues aún debe recuperarse del todo de la lesión de su pie izquierdo, pero lo que está claro es que el club azulgrana ya está rentabilizando económicamente su llegada desde el primer día. No en vano, podría costear lo que va a cobrar el crack (unos 30.000 euros, parte proporcional del salario mínimo), sólo con lo recaudado por ventas de su camiseta el primer día. Pau sigue siendo un filón para el club de sus amores.
Nota: marca.com