En las últimas semanas, Kevin Garnett fue noticia por varios hechos que lo involucran de manera directa respecto a su carrera, más precisamente a su paso por los Boston Celtics, donde conquistó el último título de la franquicia de Massachusetts. El pívot fue seleccionado para ingresar al Salón de la Fama de la NBA y, además, el equipo verde retirará su dorsal número 5 durante la próxima temporada.
Pero todo esto podría no haber ocurrido si un llamado telefónico era atendido a tiempo en 2007. Según contó el mismo Garnett en un programa radial en Chicago durante el All Star Weekend, los Lakers tenían la intención de fichar al interno que brillaba por ese entonces en los Timberwolves de Minnesota. La idea era unirse en Los Ángeles con Kobe, uno de sus mejores amigos en el ambiente del básquetbol.
Kevin afirmó que la primera opción eran los Lakers por la presencia de Bryant y Tyronn Lue en el equipo y luego estaban los Celtics. «Quería jugar con Kobe, pero él no contestaba su teléfono. Tyronn Lue y Kobe eran muy cercanos, y Lue me dijo que lo llamara de nuevo. Así lo hice, pero nunca recibí respuesta de su parte y tenía que tomar una decisión», contó Garnett sobre su llegada frustrada a la franquicia violeta y dorada.
Lo que llegó después es conocido. Esa temporada los Celtics ganaron el título de la NBA, habiendo derrotado a los Lakers en la final, y dos años más tarde sucedió lo mismo, pero con el resultado contrario. Por una llamada, el mundo fue privado de ver la que podría haber sido una de las mejores duplas de la historia dentro del rectángulo de juego.
Reviví los mejores momentos del sexto y último juego de las finales del 2008:
Nota: Emiliano Iriondo / Twitter: @emi_iriondo