En un nuevo programa de Expedición Albiceleste, charlamos con Carolina Sanchez, la jugadora del Campobasso, en la A2 de Italia. El día tres de abril se confirmó que la federación de dicho país había decidido dar por finalizada la temporada en la máxima categoría, así también como las de ascenso. La ex Selección Nacional contó cómo está viviendo la cuarentena, acompañada por la argentina Federica Del Bosco y la ecuatoriana Blanca Quiñónez.
Esuchá la nota completa con Caro Sánchez:
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— UcU Web (@ucuweb) April 6, 2020
«El día que decida no jugar más voy a avisar. Por ahora sigo, esta temporada me mató, este virus nos mató, veníamos con todas las ganas, lamentablemente surgió esto, el club tenía todas las aspiraciones para poder ascender, yo físicamente me sentía muy bien, veníamos muy bien como equipo, pero bueno, ya dieron la cancelación del campeonato, así que esperando para poder volver a la Argentina.
El viernes se tomó la decisión de finalizar la A1 y la A2, mandaron el comunicado, y por ahora sólo dijeron que está anulado. Cuando todo esto se calme y cuando la federación tenga en claro que equipos siguen la temporada que viene y en qué situación económica está cada uno van a poder decir que se hace. No pueden lanzar ningún comunicado en este momento. No se sabe si nos van a otorgar el ascenso.
El balance de la temporada es super positivo. En la última semana estábamos por disputar la final de la Copa Italia, lamentablemente por la cuarentena no se pudo disputar. El objetivo para ascender estaba muy claro, hacía tres años que el equipo lo venía peleando. Puedo decir que fue uno de mis mejores años. Yo había venido con la idea de dar una mano, con el plan de jugar 10 o 15 minutos para aumentar la rotación y surgió que terminé jugando casi 30 minutos. Tengo que agradecer la confianza del entrenador, el trabajo del cuerpo médico y la verdad que físicamente he llegado super bien, me estaban cuidando mucho, teníamos muchas expectativas para las finales, pero se terminó todo muy pronto.
Uno en la vida se tiene que poner objetivos. El último año estaba en un equipo de la B y me había planteado ascender con ellos, no me afecta jugar en cualquier categoría. Yo creo que la motivación se la tiene que buscar uno para alcanzar objetivos en la vida. Cualquiera en su trabajo tiene expectativas toda la vida, uno quiere seguir mejorando, aportando cosas. La pasión por este deporte no se quita de un día para otro. Si físicamente te sentís bien te motiva a entrenar mucho más, me decían que a los 44 años no podía entrenar a la par de las demás. Yo me siento igual que las chicas de 20, eso es lo que me motiva a seguir, cuando a mi me ponen un objetivo por delante, allá voy. Para lo que el club me necesite, voy a dar el máximo. Trato de darle consejos a mis compañeras, ayudar al cuerpo técnico, eso ha sido muy bueno.
La idea de venir al club es por un combo, dar una mano no solo con el equipo sino también con respecto al cuerpo técnico, la parte dirigencial. Estaba entrenando la categoría de U13 varones, donde estoy aprendiendo, porque es muy diferente. Estoy con el asistente de la serie A, trabajamos juntos. El me ayuda a mejorar y seguir aprendiendo en esto que va a ser algo que me gustaría poder hacer, poder aportar mi experiencia en los equipos. Si el equipo asciende, el club me pidió retirarme en A1.
En la confederación tuve la oportunidad de trabajar como mánager de las inferiores que fue algo que siempre soñe. Desde que me fui de la selección quise estar vinculada de alguna manera, por una cuestión u otra se terminó ese proceso y fue mi decisión de irme del país cuando se me abrieron las puertas en Europa. Lo que me ofrece este club es algo que siempre he querido hacer. He traído a dos menores este año, una argentina Federica Del Bosco, y una ecuatoriana, que están haciendo la parte juvenil del club para que puedan jugar como italianas y no como extranjeras. La idea es que ellas puedan venir a tener su experiencia acá.
Uno cuando lo veía desde afuera pensábamos que acá no iba a llegar. El gobierno tomó todo muy superficial al asunto. De un día al otro pasamos de tener mil infectados a más de diez mil. No supieron manejar la situación, el país no encuentra el momento de la curva, nos dijeron que iba a empezar a bajar, ha saturado todo el nivel sanitario, hemos perdido muchos médicos y enfermeras. Fueron tomando medidas mientras las cosas se expandían, es un cambio de vida muy complicado. Uno se termina asustando y fue cuando muchas chicas tomaron la decisión de volverse a su país. Me alegra que Argentina haya tomado las medidas de prevención de la forma que lo hizo.
Las calles ahora están súper vacías, los negocios cerrados, salvo supermercados y farmacias. Salgo una vez a la semana para comprar las cosas para la casa y para las chicas. Se tuvo que llegar a esa medida.
El club nos ofreció volver a nuestro país o poder quedarnos acá mientras se esperaba la resolución de la federación. Decidimos esperar para no ir y volver, yo sabía que mi contrato terminaba en junio. Viendo la situación, decidí no irme para no complicar a mi familia, sabía que en caso de volver no iba a poder estar con mi mamá porque tiene más de 70 años. Ahora si se empieza a hacer duro, me pesa no estar con mi familia, me gustaría poder ayudar a mi mamá, hacerle las compras e impedir que ella salga y se exponga.
Acá en casa, te va cambiando el día a día. Las chicas tienen su rutina, porque tienen los estudios por las plataformas online. Federica además hace cursos en Argentina. Yo empecé con mi rutina normal, despertarme, entrenar, hasta que se me empezó a cambiar el sueño, no sabés muy bien en qué día estás, perdés los horarios. La forma de frenar mi cabeza es entrenando. Se hace saturante, ellas lo están sufriendo mucho. Estamos en un departamento, no tenemos salida a un patio donde podamos tomar unos mates ni nada. Tenemos que tener paciencia hasta que esto pueda pasar.
A las chicas las veo con mucho futuro, me sorprendió mucho el físico y la forma de jugar de Blanca, la verdad que tiene una proyección muy grande a futuro. Tienen que seguir mejorando, Federica tiene que aprender a jugar más externa y no como pivote. Tienen muchas posibilidades por eso se les abrió las puertas acá en Italia. Espero poder darles una mano y que se formen acá en Campobasso.
El otro día veía el tema de la clasificación al mundial, cada vez te la hacen más difícil. Me preguntan como hacer para seguir luchando contra las diferencias del masculino, ya ahí se ve la diferencia, el mundial de varones tuvo 32 equipos y el de mujeres sólo 12, cada vez te quitan más la posibilidad, sabiendo que siempre es muy duro llegar, que los europeos y los asiáticos son potencia. Una clasificación para las chicas va a ser bastante complicada, todavía no se sabe quién va a formar parte del cuerpo técnico de la selección, no se sabe cómo vamos a seguir trabajando, yo pensé que íbamos mejor, pero hasta ahora no hemos visto nada, espero que siempre sea mejor para la Selección Argentina, pero no veo que se esté formando un grupo de trabajo interesante, no sabemos quiénes forman el cuerpo técnico, por lo tanto tampoco sabemos quienes van a formar parte del equipo. Espero que de una vez por toda esto se pueda mejorar. Va a ser un año complicado para las chicas, siempre costó el tema de sacar equipos, uno siempre va remando y nunca parece salir a flote.
Soy mucho de ver tele, las series me saturan. Cuando empezó esto del virus me fui alejando un poco del teléfono, trato de ver cosas para reirme. También trato de meterme en cosas para tratar de agilizar la mente, crucigramas, o jueguitos. Intento alejarme de las redes porque tener mucho tiempo metida ahí me termina haciendo mal. Veo charlas, ahora el club quiere que empecemos a dar entrenamientos a los más chicos, así que estoy planificando eso. Trato de tener charlas con mi gente de Argentina, escucho mucha música, e intento tomar todo esto con mucha tranquilidad. Mi consejo para todos es que tengan paciencia, que se queden en su casa, así no perjudican a nadie.»