Los dirigidos por Maximiliano Seigorman cedieron su invicto ante un brillante Puerto Rico por 77-57 y quedaron fuera de la lucha por el título. El viernes, irán por el 9no puesto ante Nueva Zelanda.
En la mañana de este jueves, la Selección Nacional U19 cayó por 77-57 ante Puerto Rico por los octavos de final del Mundial de Grecia y, después de haber tenido una fase regular impecable, quedó eliminada de la lucha por el campeonato. Los chicos no pudieron ante un equipo caribeño que realizó un partido excelente, se mantuvo a tiro y sentenció su victoria con un parcial de 35-20 en el último cuarto. Así, los boricuas consiguieron su primer triunfo del certamen eliminando a uno de los tres invictos. Fausto Ruesga fue el líder anotador con 13 puntos, acompañado por los 11 de Lucas Reyes. El interno Francisco Caffaro finalizó con 4 unidades y 15 rebotes. Argentina, que sintió el desgaste de los juegos previos, jugó un mal partido y finalizó con 18/58 de cancha, incluyendo un 4/28 de tres puntos. A partir de este viernes, los chicos disputarán la reclasificación en busca de quedarse con el 9no puesto al enfrentar a Nueva Zelanda.
Los caribeños aprovecharon un arranque impreciso para tomar una pequeña ventaja. Pero cuando Argentina se asentó y mejoró su precisión, metió un parcial de de 9-2 en los últimos cinco minutos para tomar el comando por 17-9. Ese cierre fue el único momento del encuentro en el que el equipo se sintió cómodo, defendiendo duro y corriendo el contragolpe. Leandro Bolmaro y Juan Francisco Fernández aportaron la cuota de gol, Francisco Caffaro se hizo dueño absoluto de los tableros y el seleccionado sacó rédito de haber puesto a su rival en faltas acumuladas temprano en el período.
Pero a partir del segundo cuarto todo se hizo cuesta arriba. Puerto Rico ajustó su defensa, cerró todas las vías cercanas al canasto y Argentina dependió enteramente de una efectividad a distancia que se le hacía esquiva. Los chicos apenas anotaron dos puntos en los primeros cinco minutos y el período finalizó con un 17-10 a favor de Puerto Rico, que se fue al descanso abajo por uno: 28-27.
A la vuelta de los vestuarios, Argentina no pudo enderezar el barco. El gran trabajo defensivo de los caribeños, siguió dando sus frutos. A medida que corrían los minutos, el nerviosismo crecía. Promediando el tercer parcial, Puerto Rico tomó el comando y se alimentó de las imprecisiones de los argentinos, que a la baja eficacia ofensiva le sumaron varias distracciones defensivas. El elenco nacional volvió a tener un cuarto de bajo goleo y entró al capítulo final con una desventaja de 37-42.
El último cuarto fue una pesadilla. El rival mejoró su efectividad y construyó una ventaja que le dio tranquilidad y soltura. Argentina perdió la calma y abusó de un tiro de tres puntos para el que no estaba fino. Para colmo, a medida que pasaban los minutos, la desesperación se adueñó de los chicos, que quisieron subir el ritmo sin éxito, cometiendo errores y perdiendo balones. Puerto Rico manejó la ventaja de manera brillante. Cuando los nuestros se quisieron acercar, con una presión todo el campo, Andre Curbelo ejecutó con frialdad, movió la pelota sin perder la calma y expuso al equipo argentino. La ventaja siguió creciendo, y si bien los dirigidos por Seigorman encontraron algunas conversiones sobre el cierre, su rival lo definió desde la línea y cerró un parcial impecable, en el que anotó 35 puntos.
Con este resultado, Argentina, que venía invicta en el certamen, quedó fuera de la lucha por el título y ahora deberá pelear por el 9no lugar a partir de este viernes. La derrota, inesperada por el rendimiento del equipo en los partidos pasados, dejará una gran enseñanza en este grupo de jóvenes que ha demostrado tener el talento y el carácter para seguir creciendo.
Foto: Gentileza de FIBA
Raúl Ruscitti
@raul_ruscitti