En un choque de realidades en el Polideportivo Islas Malvinas, Instituto comenzó de la mejor forma su gira por la ciudad con un contundente triunfo ante Quilmes por 83 a 63. La inspirada noche de Santiago Scala con 27 puntos y 4 rebotes, sumado a la experiencia de su corto pero efectivo plantel, fueron suficientes para derrotar al Cervecero.
El Tricolor tuvo una apagada noche de sus tiradores, y encestó 10 de 26 intentos detrás de 6,75. Pero la verdadera falencia se encontró en sus tiros de dos unidades, ya que apenas 13 de 42 fueron convertidos. Las 15 pérdidas fueron una clara muestra de las malas decisiones en aro rival. El conjunto de Bianchelli debe levantar cabeza ya que se encuentra comprometido en la lucha por la permanencia.
La contracara de esta realidad es “La Gloria”, se encuentra cuarto y aspira a seguir sumando en la tabla de posiciones. Los dirigidos por Facundo Müller se quedan en la ciudad para disputar su duelo contra Peñarol el lunes desde las 21.
El comienzo del partido fue parejo, y ambos optaron por el tiro a distancia como primera medida. Cuatro tiples, dos por lado, en poco más de dos minutos, comenzaron a darle forma al primer cuarto del partido. El Cervecero perdió cinco balones en menos de 5 minutos, y el conjunto cordobés aprovechó para sacar la primera diferencia del juego (7-14). La aparición de Juan Esteban De La Fuente fue clave para que el local regrese al juego (7 unidades), y el final del primer periodo fue 21 a 11 en favor de la Gloria.
El equipo de Facundo Müller administró el balón de mejor forma, y aprovechó de los errores defensivos y ofensivos del tricolor para lograr la mayor diferencia parcial del juego (37 a 27), a falta de 4 minutos 15 segundos para el cierre de la primera parte. Pese a perder 10 balones y no contar con su mejor básquet, Instituto jamás dejó a Quilmes acercarse de manera peligrosa, y se fue al descanso con una renta de 9 puntos (43 a 34).
En las manos de Santiago Scala estuvo lo mejor de la primera mitad, el base juninense aportó 16 puntos, 2 rebotes, 2 asistencias y un recupero en poco más de 16 minutos en cancha. Además, su equipo contó con una efectividad muy importante detrás de 6,75, anotando 5 de 10 intentos (50%). En contrapartida, el Tricolor encestó 6 sobre 15 (40%), y no contó con ningún jugador en doble dígito.
El inicio de la segunda mitad se vio a un Quilmes intenso, que salió a achicar distancias. Una bandeja de Luciano Tantos y un buen triple de Maxi Maciel arrimó al local (39-43) que siempre fue más intención que juego. La Gloria puedo destrabar su tanteador luego de 120 segundos con una anotación de larga distancia de su figura, Scala, y desde allí recuperó las riendas del partido, y con ello la tranquilidad para manejar a su antojo el desarrollo de las acciones.
El trabajo defensivo y la eficacia en aro rival, hicieron que la máxima aumentara con el desarrollo del parcial. Con cuatro jugadores en doble decena, Scala, González, Amicucci y Whelan, Instituto se fue al último descanso arriba por 62 a 44.
El último parcial solo sirvió para cumplir. Quilmes no se pudo acercar numéricamente ni en rendimiento a lo propuesto por Instituto. La propuesta colectiva, rotación y efectividad de la visita fue mucho más que las buenas intenciones y es espíritu de lucha tricolor. La Gloria se llevó un buen triunfo de Mar del Plata por 83 a 63.
Informe: Prensa Quilmes
Foto: La Liga Contenidos