Argentino entusiasmó a su gente con una victoria 89-78 sobre Quilmes de Mar del Plata plagada de sacrificio y entrega. Guido Mariani sumó 22 en el local.
El turco arrancó con los cuatro extranjeros en cancha y en un ratito estaba diez puntos abajo. Pero cuando comenzaron los cambios se revirtió la situación. Ya Quilmes no jugó tan cómodo y el barbado Nicholas Wiggins anotó ocho valiosos goles para que Argentino pasara a ganar 20-19.
Los segundos diez minutos fueron completamente distintos. A Argentino le costó ajustar la marca hacia el perímetro y recibió cinco lapidarios triples (Maciel y Fernández, 2 cada uno y Ortiz) que mandaron al Cervecero ganador al vestuario por 39-36.
El inicio del segundo tiempo fue un calco del primero. Argentino, con el cuarteto extranjero en cancha, no pudo bajar un rebote defensivo. Quilmes le tomó hasta tres y cuatro en un mismo acto. Cuando el Turco mezcló nacionales con foráneos, cambió la cara y resurgió la tarea de Nicholas Wiggins que ganó en los dos cristales y dio espectáculo. Detrás suyo se encolumnó Argentino que pasó a ganar 58-54 frenando a un Quilmes que no pudo cambiar el aire y se quedó sin gol.
Y el cierre fue a toda orquesta para el dueño de casa. Apareció Guido Mariani (2 triples, 3 dobles, 3 simples) que se va erigiendo como el tirador del equipo para que la diferencia sea casi de 20 puntos y asegurar la victoria mucho antes de la chicharra final. Por supuesto que Quilmes la peleó hasta el final y Argentino lo supo cerrar, pero la suerte visitante ya estaba sellada de antemano.
Nota: Prensa Argentino
Foto: La Liga Contenidos