El base Juan Pablo Cantero habló en UCU Radio sobre su presente, hoy sin equipo para la próxima temporada. Además se refirió a La Liga, el Super 20 y las fichas extranjeras.
«Ya casi hace dos meses que estoy entrenando lo físico. Estoy esperando tranquilo a ver que sale. Tuve varias ofertas por suerte después de terminar con Atenas, la parte económica era una traba porque pretendían pagarme mucho menos que lo que cobre el año pasado y no se si era un lance para ver si agarraba. Estuve a punto de arreglar con Manresa de España y se me fue la oportunidad. No descarto irme a Brasil. Hay que seguir entrenando para poder arrancar ya jugando. Yo se que va a salir algo y será bueno«.
«Hoy por hoy los equipos piensan el Super 20 como una instancia de preparación, es un torneo que esta desprestigiado. El Super 20 se va a tomar para foguear a los más jóvenes y para que los clubes gasten menos plata», expresó el base con paso por San Martín de Corrientes y Atenas de Córdoba, en las últimas temporadas.
«Tantos extranjeros le hicieron daño a La Liga. Arrancamos con una liga con el dólar a 17 y lo terminamos en 28. Termina el mes y hay que pagarle, ninguno se banca no estar al día. En la temporada pasada los nacionales financiamos a los extranjeros. Nosotros teníamos meses atrasados y los extranjeros estaban al día y salimos perdiendo mucho, ojalá eso se revierta».
«Es una situación compleja y la opinión del 90 por ciento de los jugadores es esta. Es un llamado de atención para los dirigentes de la Asociación de Clubes», agregó.
«Se hizo muy duro y por eso también fue mi decisión de esperar, recibir ofertas por menos plata no tenía ninguna validez. Se me hizo complicado entrenar con un equipo de Liga por eso quiero por lo menos entrenar con un equipo de Liga Argentina para estar en buen ritmo».
«Lo de Atenas y mi salida fue muy clara, hubo respeto. Hay que saber que en parte es un negocio y yo no puedo obligar a nadie ni nadie me puede obligar para seguir en un club. Estoy dispuesto a cualquier oferta de La Liga o de afuera. Es complicado volver a Atenas porque ellos quieren traer más extranjeros».
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