Gran arranque del local que con mucha actitud defensiva y un Fernández intratable bien acompañado por Coronel, tomó rápida diferencia que se extendieron a 10 sobre el final del cuarto, ante un Libertad que solo tenía a Zago y Barovero como únicas respuestas.
En el segundo parcial el “Bólido Verde” aumentó su intensidad y la grieta se fue acentuando a su favor, ahora con Vieta y Romero “encendidos” sumados al buen desempeño de Cequeira, Coronel y Jones en ese segmento netamente favorable en el que también se destacó su agresividad defensiva. Los santafesinos se fueron apagando, las respuestas del banco no llegaron y todo se reducía al aporte de su tridente Barovero-Zago-Copello, lo cual no alcanzaba. Por eso la diferencia de 18 fue un fiel reflejo de lo que estaba ocurriendo en el rectángulo.
En el tercer capítulo las distancias entre uno y otro fueron cada vez más notorias y los 22 que sacó Hindú le permitió disimular algunas pérdidas y conversiones del adversario que en ningún momento se entregó y siguió luchando. Pero los locales estaban en plena levantada y siempre aparecía alguna de sus individualidades para aplacar cualquier intento de reacción del rival.
Así planteado el partido, el último cuarto no sufrió variantes y sirvió para consolidar una justa y festejada victoria del “verde”, ante un Libertad que luchó hasta el final pero no le alcanzó. De esta manera Hindú logró su objetivo de ganar los tres en casa, se despidió de su público y ahora se prepara para visitar a Ameghino y Deportivo Norte.
Informe: Prensa Hindú
El comienzo del partido fue muy parejo debido a que ambos equipos no encontraban el gol y empujados por apostar a correr la cancha tomaban tiros apresurados que no eran efectivos, es por eso que jugados cinco minutos el tanteador marcaba cuatro anotaciones para cada lado.
Promediando cuatro minutos para que termine el primer cuarto, Reque Newsome empezó a hacerse cargo de las ofensivas locales con lanzamientos cercanos al canasto (cuatro anotaciones) y acompañado de Karel Guzmán que lastimó con penetraciones (siete puntos en el cuarto), los de Rodríguez empezaron a tomar la primera distancia importante del cuarto ante un Rivadavía que le costaba encontrar fluidez ofensiva. Con 2:02 para el final realizó su debut Diego Álvarez, base verdirrojo con la número cinco en la espalda. El uruguayo nacionalizado Argentino le imprimió defensa (en su primera acción sacó una falta ofensiva) y esto contagió a sus compañeros para que el local se vaya los primeros 10 minutos arriba 22-13.
En el segundo segmento se repitió la historia, ambos equipos tardaron en anotar y el resultado se mantenía con ventaja para el juninense, aunque cabe aclarar que ya con equipos en plena rotación con Álvarez como dueño de la base dando descanso a Laterza.
Cuando el reloj marcaba seis minutos para que termine el primer tiempo, comenzó una racha importante para los de Rodríguez que aumentaron el casillero y asfixiaron en defensa con una presión de toda la cancha a un Rivadavía que no le encontraba la vuelta al juego y que determinó en el 43 – 22 final (racha de 21-9 para Ciclista) con un goleo repartido y por sobre todas las cosas un cambio actitudinal en el costado defensivo.
El tercer chico encontró al pedalero haciéndose fuerte en la zona pintada con Newsome a la cabeza y en momentos que el nacionalizado uruguayo era doblado encontró un aliado en Paciotti que quemó las redes desde 6.75 y cuando fue ajustado supo penetrar la defensa con bandejas desde 45 grados. En la visita Welton y Llaver eran la bandera de gol naranja pero la ventaja seguía siendo grande para el equipo del “Z” que tras 30 minutos culminó 67-41 al frente.
En el último cuarto, Ciclista se dedicó a mantener la distancia y a jugar con el reloj. Con paciencia y jugando contra la frustración del rival fue elevando la diferencia y no le brindó opciones a los de Fernando Minelli para encontrar una posibilidad a la reacción. Con equipo suplente y moviendo la pelota de lado a lado, Ciclista selló una victoria vital de cara a las últimas fechas con un resultado contundente de 81 a 52.
El próximo partido del pedalero será el miércoles cuando reciba al poderoso Deportivo Viedma desde las 21:30.
Informe: Prensa Ciclista
Volvió el festejo al Paccagnella. Y también el desahogo, porque después de un buen primer tiempo en el que se fue ganando por 13 puntos (41-28), Rocamora pasó a perder el dominio del tablero pero esta vez la historia fue diferente a otras noches y pudo quedarse con una victoria clave ante un rival que venía en levantada y que lo complicó. De hecho Atenas empezó mejor el partido, bien conducido por Etchepare, se escapó por cinco pero después el local desequilibró con triples de Jovanovich y Baralle para quedarse con el primer parcial 19-17.
El segundo cuarto el Rojo lo abrió con triple de Pascal y a continuación hubo un buen ingreso de Motley, quien primero la enterró en el aro, después clavó un triple y a más tarde Baralle sumó otro más para sacar una buena diferencia (34-26). Con Motley en sintonía Rocamora se llevó el parcial por 22-11 y se fue tranquilo al descanso largo. El nuevo extranjero del Rojo fue el destacado de ese tramo con 11 puntos en total.
A la vuelta de los vestuarios la historia fue otra. Atenas metió un parcial 6-0 para meterse rápidamente en partido nuevamente. Johnson se encargó de sumar los primeros puntos y acto seguido la polenta de Cutley fue decisiva para que el Griego quede a tiro. Un triple de Agostino le permitió a la visita pasar al frente (48-49) y gracias a las corajeadas de Franco Baralle en los tramos finales Rocamora logró seguir adelante (57-56).
Motley volvió a ser importante en el comienzo del último cuarto y gracias a sus puntos y los de Johnson el local sacó cinco de ventaja (65-60). Pero no fue suficiente, comenzó a crecer la tarea de King en Atenas y Rocamora marcó mal; tanto a él como a Cutley. Ni siquiera llegó a quedar en penalización el Rojo en el último cuarto. A poco menos de dos minutos para el final Atenas ganaba por cuatro (71-75).
El minuto pedido por Varas dio sus frutos. Baralle sumó doble y falta para achicar a uno, después Johnson ganó un rebote tras un tiro de tres de King, Baralle manejó la ofensiva y buscó un triple que no se dio; pero, Johnson ganó el rebote y recibió la falta. Metió los dos libres con dos segundos por jugar y a Atenas no le alcanzó. Fue festejo de Rocamora, sufrido, pero festejo al fin. Llegó cuando más hacía falta y cuando no se podía dejar que se escapara.
Informe: Prensa Rocamora
Independiente 73-66 San Isidro
Independiente arrancó sacando un poco de ventaja en el arranque del juego. Ambos estuvieron erráticos en los primeros minutos pero Independiente de la mano de Damián Palacios en el armado y Eduardo Spalla para sacar una ventaja de 7-5 en dos minutos. Spalla se hizo fuerte con su posteo para que Inde a mitad de cuarto, junto a su defensa ponga arriba 11-7 para forzar el tiempo muerto de Julián Pagura. Después de esto, los “Halcones” ajustaron piezas en defensa y lograron incomodar a su rival y ponerse a un punto y obligar a Javier Montenegro a pedir minuto (15-14). De la mano de Martín Müller, San Isidro se mantuvo a tiro en el marcador cuando el juego se emparejó. El conjunto visitante lo cerró mejor al cuarto perdiendo por tan sólo tres puntos (19-16).
El segundo cuarto fue casi una copia de lo que fue el primero. Inde arrancó mejor con Willie Readus apareciendo en el juego imponiéndose en la pintura, anotándose los primeros seis puntos del equipo en el cuarto. Por el lado visitante apareció Germán Sciutto anotando desde media distancia. Palacios también apareció por el lado santiagueño y de esta manera, en tres minutos Inde sacó una ventaja de nueve puntos que preocupó a Pagura (30-21). El juego se volvió un tanto desparejo, ya que ambos estuvieron muy poco efectivos. El marcador se mantuvo en 30-21 por aproximadamente dos minutos hasta que un doble de Sciutto activó las cosas. Mansilla apareció con cinco puntos seguidos para darle aire a Independiente. En los minutos antes del entretiempo, San Isidro, con una muy buena defensa, se acercó y complicó a los santiagueños. Independiente tomó un poco de respiro de la mano de Reinick en la pintura y finalizó el cuarto 38-32.
Los de Javier Montenegro volvieron mejor del descanso largo. Con una defensa intensa, lograron disminuir el goleo visitante. Readus, ganándole en la pintura a Okoye, se hizo vital para el local. Palacios y Spalla, con un muy buen aporte pusieron a Inde 46-37 al cabo de tres minutos. San Isidro se apoyó en Okoye y Müller, pero no le alcanzó para frenar la arremetida local y Pagura pidió minuto. Spalla apareció con un doble para seguir agrandando la brecha santiagueña (48-37).
Readus continuó acentuando su poderío bajo los tableros, mientras que Müller sacó la cara por un San Isidro golpeado. En los 60 segundos siguientes, el juego se hizo intenso y turbulento, con mucho roce en ambos lados. Cinco puntos seguidos de Müller y Pineda, pusieron 44-50 a los “Halcones”, producto de aprovechar las imprecisiones ofensivas del local. Los de Montenegro recuperaron la ventaja con un triple de Spalla y un simple de Readus a falta de dos minutos (54-44). Independiente cerró mejor el cuarto de la mano de Robledo, que con un triple y una corrección de un tiro de Readus, puso las cosas 59-46.
En el arranque del último cuarto, Spalla, como en todo el juego, aprovechó sus buenos movimientos en el poste para sacar ventajas y ganar sus puntos desde la línea. Después de un doble de Müller, el goleo se congeló por un minuto, en un juego de ida y vuelta desorganizado. Aimaretti, con un doble achicó la desventaja a diez después de tres minutos jugados (62-52). En medio de una áspera batalla con Readus en la zona, Okoye convirtió puntos vitales para la esperanza del Halcón de ganar el juego a falta de cinco minutos. Readus , también contestó del otro lado y con un doble bastante luchado le dio ventaja de once a Inde un minuto después (68-57).
En los cuatro minutos definitivos, Pagura apostó a la rotación de su equipo y le dio resultado. Defendió bien y provocó varias perdidas en el conjunto Santiagueño que se las vió negras en el último minuto. En este lapso de tiempo San Isidró apretó el acelerador y se acercó a cuatro de la mano de Sciutto y Okoye (68-64). Spalla, con un triple y un doble oportunísimos le dió vida a Independiente que cerró el juego ganando por 73-66 a un rival directo.
Informe: Prensa Independiente